El Ansia

Así como todos esperan con ansias la inmunda primavera que precede al verano, a mí me encanta el otoño que precede al invierno: el color anaranjado del sol, el halo de palidez de la piel y sobre todo la reinante oscuridad. Me van a perdonar, pero es que estoy escuchando las sonatas de Beethoven y me siento como la versión trans de uno de los melancólicos vampiros de Anne Rice. De todos modos, no tengo nada por lo que estar triste. Todo lo contrario, a mí el frío me inyecta de energía para hacer cosas y hace como dos fines de semana que me la paso deambulando noche trans noche. El sábado pasado fue el cumpleaños de la Leandro –la Insulina- Toyboys, pero antes me reuní con Peter y la banda en la casa de Fok durante el ensayo para la próxima fecha.

Como siempre, fui la primera en llegar. Juampi estaba entrenando, así que me quedé en la cocina tomando un té con su gato Gastón. Nos llevamos muy bien él y yo, todavía me guarda cariño desde las épocas en que me quedaba a dormir en ese departamento. Al rato sonó el timbre y era Peter. Mientras esperábamos a que llegaran los demás, Fok se puso a enseñarle unos ejercicios de canto que está aprendiendo en el Conservatorio de Música. En un momento la instrucción fue: “poné la boca en forma de O, como si estuvieras haciendo una fellatio”. Yo muda me moría por dentro, pero no dije nada. Hice una nota mental al respecto y seguí en la mía. Volvió a sonar el timbre y esta vez eran Aramí y Novella que llegaron juntos. A mí no me gusta crear falsos rumores pero me parece que ellos dos se encontraron un rato antes.

Peter había llevado la lista de temas y Novella planteó acortarla porque era demasiado larga. Por otro lado, Aramí propuso hacer la versión de “Vos, tu novio y yo” en mash up con “Smalltown Boy” de Bronsky Beat. A mí se me iluminaron los ojos, me encanta ese remix que sólo existe en vivo. Después de discutir un rato, acordaron en abrir con “Quiero ser una chica”, pero Fok propuso hacerla en una versión más tocada en vivo y con menos instrumentos en la pista. De a poco cada uno fue aportando lo suyo y todo empezó a reordenarse y a tomar otra forma. Si bien el ensayo fue sólo de un par de horas, fueron dos horas muy intensas. Hacía mucho que no se juntaban los cuatro y la química permaneció intacta. No puedo esperar a ver el show del próximo sábado.

De lo de Fok me fui para mi casa a descansar un rato y a cambiarme para ir al cumpleaños de la Insulina. Aproveché el fresco para estrenarme el tapado Givenchy que me trajo Marcelo de París y me puse unos pendientes en forma de estrella como los de Jem que me regaló Leandro cuando nos conocimos. Solamente sus manos mágicas pueden convertir una lata de coca cola de aluminio en un par de aros de los 80 soñados por más de una. Me pareció que era la ocasión para volver a lucirlos. A eso de las 10 me pasó a buscar mi taxista y salí para Devoto. ¿Les conté que ahora tengo taxista? Lo conocí en uno de mis famosos viajes de regreso a casa, un chico jovencito de Avellaneda que a veces me gusta invitar a pasar a mi piso. En la casa de las Toyboys me recibieron Leandro y Ezequiel junto con Peter y mi amiguísima la Isis. Hacía tanto que no nos veíamos que al principio no me reconoció. Nos pasamos la noche poniéndonos al día acompañadas de unas riquísimas flores. La reunión se extendió hasta más de las 5 de la mañana, por suerte la Isis tenía auto y nos trajo de vuelta a Peter y a mí. En el camino nos sentimos como Thelma, Louis y Brad Pitt, huyendo del aburrimiento y pasándonos todos los semáforos en rojo.

El domingo hice reposo reparador y esta semana siguen los ensayos. Estamos trabajando duro para usted, así que ansiamos verlxs a todxs en el próximo recital de Peter Pank & los chicos perdidos este sábado a las 23 hs en Mi Casa (Agüero 787) en la fiesta “Ni Disney ni Hawaii”.